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Mostrando entradas de septiembre, 2021

Las noches entre versos

Auguran su más límpido dominio las noches entre versos que aquilatan,  sacuden desveladas sus nostalgias. las musas que revelan acertijos. Se nutren amorosas del lirismo que fluye siempre diáfano en su viaje, dejándonos su estío entre paisajes que exultan el lenguaje de la vida, en tanto solazadas  con la brisa  se mecen sus auténticas verdades. Y escucha acompasadas melodías la ilusa poesía en su remanso, se apropia del amor en su agasajo y expresa la  magnífica osadía. Cadencia en su más rítmica caricia propone sus arpegios delirantes,  inspira al horizonte en sus azares, converge en abundancia jubilosa sanando cicatrices que en las sombras  pretenden sofocar los madrigales. Sorprende el galicinio milagroso, refiere al sortilegio de la noche, se asoma revelándonos sus dones y muestra lo genuino de su rostro. Nos hace enamorarnos del asombro que sabe del adagio de la espera, trasciende siempre libre y sin fronteras, consuma refulgente el sortilegio e irrum...

¡Felicidades Cascadas de Luces!

Hoy cumple su décimo aniversario mi blog Cascadas de Luces. Todo una década compartiendo mis sueños, pesares, alegrías, el Olimpo de las musas que han cautivado mis instantes y el Delfos donde fluyen manantiales de esperanzas versadas entre nostalgias y añoranzas. Visitas que han dejado huellas en mi ser y motivan los deseos de seguir atada a mis letras, que son sin dudas las confidentes egregias de mis sueños. Gracias a todos los que me han seguido en este periplo de retos y desafíos. Todos han formado parte de esta Cascada de Amor que arrastra consigo la historia que escribe mis anhelos.  ¡Felicidades Cascadas de Luces! Cascadas de mis sueños  Cascadas de mis sueños han brillado las musas  van danzado con la lira, confiando en el susurro que conspira el délfico parnaso que ha versado.  Cascadas de mis luces cual remanso del eco de mi voz que no silencia y el canto del azar y la inocencia: son letras peregrinas sin descanso. Cascadas de mis versos han vagado en íncl...

Surte horizontes

Mi verso en libertad surte horizontes,  se enfrenta a desafíos entre notas, la pluma surca valles, se extrapola dejando su verdad sin condiciones. Y vive el fiel suspiro de las noches, aquellas que palpitan entre anhelos, dibuja sus oasis, sus desiertos mostrando palmerales que conectan, batallas que engrandecen la belleza que saben del hacer desde el silencio. Y entonces se estremece el florilegio, aquel que se ha guardado en las memorias, que hilvana en el desvelo cada historia   e intenta conspirar desde lo intenso. En tanto es confidente el universo, aquel que multiplica la esperanza, que inspira en el vibrar de la palabra la esencia potencial del pensamiento tan  libre en su albedrío y mensajero del vasto despertar en su algazara.  Revuela la vital perseverancia, en tanto se conmueven las vestales que incitan a las musas con donaire al plácido remanso en alabanzas. Tan suaves, siempre ilusas, delicadas viviendo en sus brillantes laberintos,  revelan su...

Revolando entre versares

Son azules las quimeras revolando entre versares, se surten de los azares de mis baúles de esperas. Siempre surcan las fronteras eclosionando en sonrisas, con las ideas precisas que abrazan tantas pasiones y acicalan las razones con atrevidas premisas. Al alcanzar primaveras dejan sus notas del alma, prodigando fresca calma con sus razones sinceras. Mientras tanto consejeras son las palabras de aliento, que incentivan el momento de alcanzar lo que florece, mientras el tiempo se ofrece cultivando el sentimiento.

En la verdad de su quimera

Alcorza lo adorable desde el alma, se viste con sus galas el estío después del cruel invierno el desafío impulsa la verdad que impregna calma. Es tierna la más bella pincelada que surte el esplendor de lo genuino, consigue conspirar con lo divino haciendo su promesa en la alborada. Nos urge la entrañable primavera que se ha de perpetuar en sus bondades, gozando en la verdad de su quimera. Sin sombras de obcecadas tempestades se asoma esa sonrisa verdadera: ¡en medio de supremas voluntades!

Nuevamente la esperanza

Florece nuevamente la esperanza, el iris del amor pone su sello han sido largos años de desvelos, de miedos, pesadillas y acechanzas. Fue tanto el desamor y la arrogancia, rencores desmedidos sin respeto, caminos mutilados sin sosiego dejando su desdén entre falacias. Renacen las verdades sin patrañas y el mundo se apasiona en su renuevo, la vida ha de vencer el desconsuelo tejiendo fieles lazos sus mañanas. En medio de lo adverso una llamada al franco despertar desde lo pleno, revierte la crueldad que en su momento impuso sus mentiras despiadadas. Al fin muestra su alianza la algazara al ínclito horizonte de derechos, defiende la justicia, lo supremo que alcorza lo adorable desde el alma. 

Heriste mi verdad

Heriste mi verdad con tus mentiras, tan cruel es la falacia que atropella,   impacta con maldad, dicta sentencia, y alcanza en el rencor tantas intrigas. Fue duro continuar en el sendero, difícil comprender locos esquemas, vivir la adversidad con sus ausencias sintiendo las presiones y los miedos. Dañina la maldad que en su epicentro detona sin piedad a cualquier hora, no cree en la bondad sólo se mofa de aquello que solloza entre lamentos. La cruda falsedad ya se anticipa y muestra su arrogancia en el desvelo, mas siempre una lección surte el efecto y sabia nos conduce a la salida. Un túnel de paciencia que motiva al sueño que se crece en su riqueza, gozando del empeño y de la fuerza que justa nos conmueve y nos inspira. Heriste mi verdad, no tengo dudas y busco en la certeza la respuesta que logre convencer clara y directa, sin sombras, ni mordazas absolutas.

Cuando la luz expira

Se imponen las verdades de osados sentimientos en medio del cansancio cuando el bregar sonríe, son tantas las razones para empezar de nuevo   y levantar las fuerzas mientras la vida sigue. Así besan sus lunas, se vierten los sentires y el rosicler nos calma, nos llena y nos inspira, regala la inocencia del alba sin medida, permite que el sendero completo se prepare para el andar paciente que con su paz nos sane y alimente las noches cuando la luz expira. Cuando la luz expira y el Sol en el ocaso despide con colores el día en su presente, reviste con donaire al cielo en el oeste que danza en su romance de anhelos desvelados. Sublimes equinoccios que intentan arrebatos cuando la vida acierta sus claras primaveras, conducen al estío que irrumpe en la quimera que abre a la esperanza su despertar genuino, humana y vulnerable venciendo el desafío que junto al universo su batallar ofrezca. 

Y crecen entre versos

Dejando en el camino sus huellas mensajeras las letras que entre azares se surten de la vida, proclaman sus placeres, sus gozos, sus albricias, nostalgias y pesares, caprichos y promesas. Defienden la palabra con justa vehemencia no juzgan las acciones que esconden lo sombrío mas sienten los impulsos de intensos desafíos que inspiran horizontes de anhelos que consagran entregas desde el alma feraz que se aquilatan tan fúlgidas que ilustran senderos atrevidos.  Y crecen entre versos frondosas añoranzas que nutren los sentires  multiplicando sueños,  no insultan ni atropellan, bendicen el desvelo que impregna su sapiencia bruñida de esperanza. Ilusas oraciones que fluyen mientras aman la fuerza que arremete vital sin contubernios, revelan sus enigmas, sus crípticos intentos mientras justas alcanzan lo fiel que persevera y aún en los aciagos que incitan las querellas se imponen las verdades de osados sentimientos.

Vital en su albedrío

Buscando en los desiertos oasis y quimeras se adentra la esperanza en medio de lo adverso, conspira decidida tocando al universo y enfrenta desafiante los muros y fronteras. Se inspira en lo que alcanza la luz de las praderas y justa visualiza lo diáfano y diverso, confía en su pujanza, desecha lo perverso y deja en el camino sus huellas mensajeras. Virtud que desemboca en vasta vehemencia, tan sólida propone vencer el desafío teniendo como aliados la paz y la clemencia. Cosecha de la vida que esplende en el estío, tan fértil mientras marca su amor en la sapiencia y libre se revela vital en su albedrío.  

Viviendo de un ayer

Me siento vulnerable, yo lo acepto en medio del aciago y la desdicha y es duro caminar por la colina cruzando laberintos en silencio. Se impone el desamor en el desierto y un poco del rencor acorralado permite castigar cada peldaño, dejando su flagelo irreverente que atiza y que golpea desde siempre, trayendo las descargas del quebranto. Trayendo las descargas del quebranto con todas las heridas descubiertas, sangrando de dolor va la tristeza en medio del pesar y del cansancio. Y encierra a la nostalgia en el ocaso se niega a transformarla en primavera, no entiende de esperanzas, de quimeras queriendo perpetuarse en los recuerdos, viviendo de un ayer entre lamentos que impide amanecer tras la tormenta.

Es triste

Y siento el gran abismo que me acecha en ráfagas que lloran sus nostalgias, las trazas del dolor en mis mañanas marcando un corazón con duras  piedras. Asumo la ilusión que me atormenta y es triste asimilar la desconfianza, el trato despreciable que amenaza que culpa, que señala y desconcierta. Difícil el camino en su madeja e injusta es la misión cuya fachada, lastima sin conciencia en su arrogancia pactando en alevosa estratagema. Mas pienso en el hacer que no me pesa y busco la cobija que me ampara, si acaso la razón que se aquilata en medio de las dudas se entremezclan.  Odiosa  incertidumbre que encadena que agobia cuando ataca a la palabra, traiciona con demencia en su falacia   dejando mil preguntas sin respuestas. Es dura la verdad, cruel y siniestra, se vale del rencor mientras masacra lo tierno y generoso en su avalancha  de injurias, de atropellos e insolencias. 

Tan firme en la humildad

Se entrega a su misión reveladora  y ofrece en el andar tantas albricias, lo digno que proclama sus delicias en cada batallar que se atesora. Admira esa pasión emprendedora que impulsa vehemente sus ardicias,  supera la angostura sin malicias  fulgiendo en la promesa creadora. Impetra con ahínco y vehemencia la diáfana verdad que no claudica y busca en la esperanza confidencia. Entonces con amor se multiplica la fe que se ha nutrido en la experiencia, tan firme en la humildad que magnifica. En tanto dignifica  la hazaña que perdona, que tolera, que abraza la virtud y persevera.

Maś que una quimera

Se empina mucho más que una quimera y toca el infinito con su trino lo excelso, lo sublime, lo genuino, que rompe los barrotes de la espera. Y siente el deslumbrar cual primavera que impone en su renuevo lo divino, lo intenso, lo esencial y diamantino que absterge y purifica a su manera. Remanso que se ofrece refulgente y osado se deleita con la aurora dejando lo feraz en su relente. Y brilla en el rocío que enamora lo límpido, sin mancha, que esplendente, se entrega a su misión reveladora.

Y en el verdor del monte

Teniendo como alforja la esperanza iremos ofreciendo el optimismo tratando de inyectar el dinamismo con gotas que ponderen la confianza. Sublime es  convocar en alabanza lo sabio que se salva del abismo que huye del nefasto pesimismo y justo persevera en su bonanza. Abriendo nuevas puertas y senderos mostrando lo feraz del horizonte,  seremos los sapientes mensajeros. Sin rutas  gobernadas por arcontes haremos competentes escuderos, que fieles se alzarán en su remonte. Y en el verdor del monte esplende nuestra fe que verdadera: ¡Se empina mucho más que una quimera!

Iluso en su quimera

Tú siembras el futuro en lo diverso, regalas la paciencia, el optimismo, superas la tensión del espejismo y tratas con cariño lo disperso. Es cierto que castiga lo perverso aún cuando se vence el pesimismo, resulta siempre cruel el egoísmo y al mismo hay que enfrentarlo con lo terso. Tan limpio, siempre diáfano y bruñido se entrega el corazón resplandeciente lustrado, siempre amable y convencido. Iluso en su quimera refulgente inspira lo mejor agradecido gozando de la vida sabiamente. Defiende vehemente surtiendo su calor y su confianza: ¡teniendo como ángel a la esperanza!

Abriga la verdad de sus pasiones

Y enseña en el crepúsculo sus dones la vida que en su intento persevera, exorna su anhelada primavera y abriga la verdad de sus pasiones. Abriga la verdad de sus pasiones y vive en su periplo una quimera, ya sabe de lo intenso de la espera que impulsa y multiplica sus razones. Edénico el ocaso y su hermosura compite con la luz del universo que siempre nos inspira a la aventura. No importa los tropiezos de lo adverso la vida nunca pierde su ternura y siembra la esperanza en lo diverso.

Desde el alma sus pasiones

Lo intenso, lo leal y lo diverso conspiran con lo diáfano que espera, que intenta seducir desde su hoguera prendiendo con fruición al universo. Y entonces va el poeta con su verso queriendo acariciar en la pradera, el verde de la tarde en la ribera que encuentra superar lo que es adverso. Y enseña en el crepúsculo sus dones lo fértil del amor surte su efecto y entrega desde el alma sus pasiones. Seguro en su constancia va el afecto que enseña lo mejor de sus razones y siente repulsión frente a lo abyecto.

Creyendo en el amor

Y expande el horizonte a la quimera creyendo en el amor que hace milagros, que acerca la esperanza a su remanso y vuelve a florecer en primaveras. Merece la caricia que da fuerzas en medio de lo triste del quebranto, teniendo la experiencia de un pasado que impuso sus murallas entre piedras. Difícil el camino hacia la cima en medio de angosturas y silencios, mas pudo ser el cómplice que inspira. Sorprende en el hacer cual misionero que busca conciliar en sus primicias lo intenso, lo leal y lo diverso. 

Retando al buen amor

Y juntos confabulan en su alianza enfocan su pasión por el presente, defienden el ahora vehemente retando al buen amor en su bonanza. La fe deja sus huellas cuando alcanza y libre persevera en lo evidente, en tanto siempre sabia y justamente abraza solidaria en la añoranza. Es cierto que el hastío se supera si logra el corazón vencer el duelo y puede acariciar la primavera. No entiende del rencor ni del recelo y expande el horizonte a la quimera que ilusa se alimenta del anhelo.

Nos habla un corazón

Nos habla un corazón enamorado en medio de una aurora de revuelos, sabiendo que entre todos sus anhelos la vida ha sido intensa y lo ha marcado. Encuentra la razón que se ha pactado sintiendo esa pasión en los desvelos, aún en los instantes paralelos el eco del amor borra el pasado. Tan tierno es lo que abraza cuando inspira seguro, tan leal en su confianza, que entrega más que el alma si suspira. Y apresa entre sus alas la esperanza, la besa cual tesoro que se admira y juntos confabulan en su alianza.

Con toda intensidad

Beber todo el caudal de la abundancia me invita la utopía de tus sueños, sentir que de la vida somos dueños con toda intensidad, sin nigromancia. Amar con la feraz perseverancia aún en los instantes más pequeños, sin sombras, sin falacias o diseños tratando de sanar la discrepancia. Y es plena la pasión que nos alcanza que sabe congeniar con el pasado  abriendo  un horizonte a la esperanza. En medio del camino insospechado,  aún en las primicias de una alianza nos habla un corazón enamorado.

El caudal de su abundancia

Mientras justo persevera en lo divino,  lo leal deja su impronta cuando alcanza la beldad que viene atada a la esperanza y que brilla en lo esencial y en lo genuino. Y es que el tiempo nos seduce peregrino cuando sabe de ese amor en cuya alianza, confabulan la virtud con la añoranza y solazan los azares del camino. Tantas veces anhelamos la ambrosía que destila en el idilio su fragancia cuando osados nos llenamos de energía. Y es que el verbo del hacer en su constancia nos conmueve y nos inspira en armonía a beber todo el caudal de su abundancia.

Y suspira el corazón

Ni el conjuro de un amor entre rincones pudo entonces hilvanar tanta locura, pues la vida en su bregar, en su aventura no se supo liberar de sus presiones. Y suspira el corazón sin condiciones él admite la verdad con su frescura, alimenta su obsesión en la ternura mientras tanto multiplica sus razones. Es tan frágil la palabra que se escapa, que prefiere silenciar lo que es genuino y detrás de una mentira se solapa. Mas persiste ese decoro peregrino que defiende vehemente lo que atrapa, mientras justo persevera en lo divino.  

Hoy laceran mi pasión

Los mensajes entre anhelos conspirados hoy me hablan de sus tórridos placeres, de alboradas entre azar y rosicleres y de tantos juramentos consagrados. Los instantes para siempre recordados hoy laceran mi pasión de amaneceres, los reclamos entre tantos pareceres se escabullen entre locos desenfados. Y es la triste realidad de nuestros días, tu manera de evadir mis emociones confundiendo realidades y utopías. No te ampares tras historias sin razones, no te creo tus actuadas osadías ni el conjuro de un amor entre rincones.

En la triste soledad de la partida

Y no quiso asimilar tantos desvelos en la triste soledad de la partida, fue la osada decisión que en la barrida puso el énfasis final entre recelos. Fue tu ingrata solución quien entre velos pudo entonces alienarse en la estampida, de la intrusa falsedad que en su medida trascendió sin superar todos sus duelos. Hubo noches de escapadas clandestinas, de suspiros que alucinan inspirados desnudando sus pasiones más genuinas. Mas las dudas desvistieron sus pecados como notas que abrazaron peregrinas: ¡los mensajes entre anhelos conspirados!