Y duele
Aquello que lacera perspectivas en medio de lo adverso, de lo amargo, socava los anhelos, las sonrisas dejando soledad entre quebrantos, cargando la tristeza intempestiva que llega con las dudas del pasado e irrumpe en el presente sin medidas tocando el corazón en sus aciagos. Y duele la falacia, la apatía los días entre penas y fracasos, caprichos silenciosos en vigilia y asuntos discutibles sin contratos, las noches de impaciencia compartida, los besos escondidos del ocaso, la cruel incertidumbre a la deriva y el odio que castiga sin reparos.