Aquí contigo.
el tiempo no castiga si alejo los rencores.
Estando aquí el vacío lo llenas con canciones,
que eternas nos evocan sagradas ilusiones.
Estás al lado mío presente en mis acciones,
aplaudes mis quimeras, perdonas mis errores.
Estando aquí contigo destierro las visiones
de oscuros espejismos y errantes sinsabores.
El éxodo de penas refugia en sus dolores
las nómadas tristezas y necias ambiciones.
Si estás al lado mío la luna de mis noches,
bendice los encuentros loables de pasiones.
Si estás aquí conmigo no hay sombras ni aflicciones,
el tiempo escribe sendas de azares cual legiones
de célebres promesas y épicas acciones,
que ensalzan pensamientos y ufanas emociones.
No hay frívolas entregas ni erráticos perdones,
si estás aquí a mi lado no hay grises nubarrones.
Diluvia la esperanza auténtica sus dones
y el tiempo traza brechas sin odios ni rencores.
Diluvia la esperanza auténtica sus dones
y el tiempo traza brechas sin odios ni rencores.
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