Curiosa en el albur

 La musa se contagia con la risa

y avista el universo que convoca,

no quiere claudicar su voz provoca

y roba de soslayo una sonrisa.

Curiosa en el albur cual pitonisa

resalta su donaire de escultora,

cincela la esperanza con la aurora

y logra una fusión de maravillas,

luciendo el arrebol de sus mejillas

y el garbo de su gracia seductora.


El garbo de su gracia seductora

combina con la noche opalescente,

mostrando su elegancia reluciente

y haciendo ver su esencia tentadora.

Bien sabe de su estirpe soñadora

el brío del tintero que improvisa

sabiendo que su ingenio cual premisa

requiere encantador de una quimera

que inspire una romanza con la espera

y pueda contagiarse con su risa.


Comentarios

Entradas Populares

No sean

Regalo de vida

Con las caricias de entonces

Mas el Brío se Revela con Empeño